Yo misma.
19.2.10
El verdugo
Yo misma.
Devuélveme la vida
y parece que todo está bien,
la cicatriz comienza a arder
solo para recordarme que
con esto te perdí;
que jamás volverás a ser parte de mi.
Que... tristemente...
en mis ojos ya no te reflejas.
Que rabia saber que
una sola palabra fue
cual fusil que mato a nuestras almas,
cual tornado sobre la ciudad.
Que dolor conocer que ahora
camino sola con mi soledad
y que en la distancia
ya no te he de encontrar.
Maldita la sensación mía
de tenerte junto a mi
y volteo pero no estás.
Te he buscado
en el aire, en el campo,
en la canción,
en las melodías, en las letras.
¡Ah! pobre del alma mía
desolada y triste está
rota en pedazos
anhelando retornar
a tu mundo, a ti.
Quisiera ser a veces
como el viento,
para poder encontrarte con solo soplar,
para poder hacer que
tu esencia regresara a mi.
Me muero sin ti porque
ya no soy yo.
Regresame tu presencia,
tu mirada, tu caricia,
¡Devuélveme la vida!
Recuerdos del hombre sonrisa (después de un trago)
17.2.10
Buenos días solecito!!
Hoy tengo una alegría que me invade por dentro y hace que me vea tan radiante como tú en mis recuerdos, ojalá pudieras verme.
El día de ayer culminó de manera fantástica gracias al bolsillo de mi compañero que ya me esperaba con una sopa instantáneas y un vaso de refresco, eso es para festejar!!
He sobrevivido a mi primer día y voy contando el número uno de los benditos tropiezos de esta nueva vida, bienvenido sean si me hacen aprender!!
Festejo también que el astro mayor acarició mi piel cuando esperaba el autobús para trasladarme a este pedacito de oficina donde habito, el frío me calaba hasta los huesos cuando salí del nido de cucarachas, pero el sol hizo su trabajo cuando debía de hacerlo.
Festejo también que estoy viva y que respiro, que tengo dos manos que me ayudan a transcribir las ideas de un única y loca cabecita, dos piernas que bailan nerviosas cuando veo al mensajero parpadear,una boca que susurra tu nombre cuando estoy por dormir, deseándote un delicioso descanso, una nariz que inflama mi pecho cada que respiro y todo un conjunto de órganos que me mantienen con vida y salud para poder decirte que mi mayor festejo el día de hoy es por ti.
Festejo porque estas vivo y estas presente en mi vida y en la de muchas personas más, porque el mundo sin ti no sería igual (por lo menos no el mío); porque tienes un corazón palpitante en tu pecho que anuncia que estas vivo, festejo porque el día de hoy hace algunos años alzaste la voz en un grito para decirle al mundo 'aquí estoy , este soy yo!', y desde entonces has ido marcando tu camino, dejando huella donde quiera que te pares gracias a tu paso firme y fuerte.
Hoy levanto mi coctel de medicina para brindar por ti desde aquí, hoy mis dedos vuelan sobre el teclado para desear que sea uno de esos días inolvidables.
Quisiera estar cerca y darte un abrazo como sólo yo los sé dar, pero a falta de eso te dedico mis letras y espero que éstas te hagan sentir la calidez de mi abrazo y la frescura de mi beso en tu mejilla.
Que no se te olvide que yo te quiero.
Tuya.
Ross
(hoy tengo ganas de ser una mariposa y volar hasta tu encuentro)
Kelebek
11.2.10
Cuento de un día.
Salimos d casa con la esperanza de que el día fuera mejor que ayer y un poco peor que mañana. La pelirroja usaba un vestido exótico, tanto como ella. Se veía linda y encajaba más en el retrato que el freak hizo de ella.
Él con su traje habitual de desapercibido y una máscara caliendo del bolsillo de su pantalón para usarla ‘solo en caso necesario’.
Yo, después de una hora de usar artilugios para verme mejor, salí peor que en día de campo.
Caminamos los tres en silencio, participándonos nuestros pensamientos a través de miradas y sonrisas. Fijamos la hora en que el plan se realizaría. Me quedé en un cruce y encomendé a los dos locos a su destino.
Yo corrí, corrí mucho, a veces me fatigaba, pero llegué a la casa del magnate de las telepatías rogando por un trozo de pan; aceptó dármelo a cambio de un poco de esclavitud. Cerramos el trato.
Después me encontré con la menuda dibujante, hablamos de los colores que vamos a modificar en el arco iris, de cómo planea vestir a Chiapas y de cuándo pretende bañar su cuerpo en el mar. Fue un encuentro breve pero agradable.
Un rato después fui a charlar con Catadora de Sonrisas y le expuse mis puntos en contra de su suicidio. No hay vuelta atrás, lo hará y yo la contemplaré gustosa de que sea firme en sus decisiones.
El nido de cucarachas me esperaba gélido como de costumbre, les pedí hicieran un huevo para recostarme a espiar la correspondencia que mantienen Catadora de Sonrisas y el Joven Huesudo. Me han dejado fascinada las líneas que con esmero Huesudo le dedica a Catadora, es admirable como ha crecido su letra.
Con la recomendación ‘a darle’ me fui perdiendo en los brazos de Morfeo, mientras las cucarachas se acurrucaban debajo de mi axila para recibir un poco de calor. Soñaba con un gran teatro adornado con telas de múltiples colores, en el escenario los actores reían y lloraban todos a la vez, bailaban siguiendo alguna extraña melodía que entonaba la orquesta inexistente. Podía sentir la música en mis oídos era parecida al sonido mágico de las hadas, pero llegó un momento en que se hizo más fuerte, y los actores bailaban frenéticamente, tanto ruido visual se me pareció insoportable y tuve que despertar, sólo para darme cuenta de que el sonido provenía del móvil y que Freak me buscaba; tardé un poco en reaccionar y cuando fui a su nido el y Pelirroja ya no estaban.
Por el momento me encuentro sentada en las raíces de un árbol, esperando a que Freak llegue; mientras, la brisa de la noche congela mis dedos. Las sienes me punzan. Fue un día de emociones fuertes. Espero poder despertar mañana.
Escrito en las jardineras de Chapultepec. (bello, muy bello lugar para estar con Soledad)
K.