12 Ene 2007
Estimada Osborne:
Enemisto las despedidas. Despedirse es resignarse a la pérdida de alguien y acostumbrarse a su ausencia, no asisto a semejantes rituales de auto-compasión, ni los secundo.
Pediste mi consejo y te lo ofrezco, no esperes nada, no creas nada, la verdad, como todo, depende únicamente de tí, y, si te permites aceptar que tu travesía supondrá un obstáculo o una distancia, entonces así será, cosa que, sinceramente, yo no deseo.
Eres una mujer inteligente y capaz, no te permitas el enredarte en debilidades o fruslerías, el mundo espera siempre hambriento por nuevos corderos, tú lo sabes.
Por tanto, yo no me presenté pues no deseo decir adiós, deseo decir: hasta luego... Que Tengas Suertecita...
Atte: Armand
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